Si has llegado hasta aquí es porque tienes un piso de alquiler y estás muy interesado en ver cómo puedes darle un lavado de cara sin gastar más de lo necesario y respetando el acuerdo al que llegaste con tu casero sobre los arreglos que se pueden hacer. Aunque en ocasiones el propietario no está conforme en que se hagan cambios, algo que nos puede traer grandes quebraderos de cabeza y más si no nos gusta nada cómo está decorado el piso.
Por eso, hoy te quiero dar una serie de consejos e ideas para que tu nueva casa resulte lo más confortable y acogedora posible.
1- Llega a un acuerdo con tu casero
Uno de los puntos más importantes cuando vas a alquilar una casa, es acordar con el propietario lo que se puede o no hacer para mejorar el aspecto de la vivienda. Aunque pueda resultar misión imposible y más cuando se niega a tocar nada, debes hacerle ver tus necesidades y que la casa que estás alquilando va a ser tu hogar, por lo que es necesario para ti adaptarla a tu gusto, además eso mejorará notablemente su aspecto, algo que revalorizará su valor de cara a futuros inquilinos.
Pero, si a pesar de todo te resulta muy difícil llegar a un acuerdo, piensa que siempre tienes la opción de modificar algunas cositas como la pintura, la grifería y otros detalles y cuando finalice tu alquiler siempre podrás dejarlo todo como estaba.
2- ¿Por dónde empiezo?
Una vez superada la primera y más complicada fase, llega el momento de realizar las tan ansiadas mejoras que harán de la nueva casa tu hogar. Y ahí es donde surge la pregunta. ¿Por dónde empiezo?
Lo primero que debes tener claro es que todo lo que compres se irá contigo cuando finalice tu contrato de alquiler, por lo que te aconsejo que no inviertas en muebles demasiado grandes o pesados, cuanto más ligeros y modulares sean mucho mejor.
El presupuesto para los arreglos dependerá del estado de la vivienda y siempre de lo que estés dispuesto a gastar, por eso te aconsejo que priorices y hagas un repaso general para ver que estancias son las que necesitan una renovación urgente y es ahí donde debes invertir más tiempo y dinero.
Una mano de pintura no viene nada mal siempre que la casa lo requiera. Recuerda que siempre puedes volver a pintar si es que no has llegado a un acuerdo con tu casero.
En caso de que no quieras liarte mucho pintando toda la casa, puedes optar por darle color a algún paño de pared únicamente o bien utilizar algún papel pintado para personalizar más la estancia.
3-Cocina y baño muy antiguos
Este es sin duda el mayor temor cuando vamos de alquiler, ¡el estado de la cocina y los baños! «Pues bien», no debes preocuparte porque todo tiene solución. Si los azulejos son muy antiguos o tienen unas cenefas horrorosas, siempre puedes ocultarlos, bien con pintura especial para azulejos, en el caso que tu casero este de acuerdo (aunque probablemente no lo esté), por lo que en este caso te recomiendo que utilices azulejos o cenefas vinílicas que tienen muy buen resultado.
Cocina
Ya tienes un problema solucionado, pero si lo que te lleva de cabeza son los muebles de la cocina, te aconsejo lo mismo que con los azulejos; Utiliza pintura si puedes y si no recurre a los vinilos especiales para muebles o encimeras ¡Te sorprenderás! Si, por el contrario, no deseas hacer mucho gasto o no te ves poniendo vinilos en los muebles, piensa que el estilo vintage no pasa de moda y siempre puedes completar la decoración de la cocina con detalles y complementos que le den carácter y originalidad.
Baño
En cuanto al baño: un cambio de cortinas; grifería nueva; un mueble bajo lavabo o modular para almacenar que junto con algo de deco quedará espectacular!!
Cuando el suelo o los azulejos son viejos o están anticuados, puedes solucionarlo al igual que con la cocina con un bonito suelo vinílico que puedes colocar sobre el que hay y además es muy sencillo de instalar o bien una solución más rápida y económica es recurrir a unas alfombras para ocultar ese suelo que no te gusta nada.
4-Salón
El salón es una de las estancias de casa en la que más tiempo empleamos relajándonos y disfrutando de un merecido descanso después de un duro día de trabajo, por eso es tan importante que sea lo más cómodo y acogedor posible enfocándolo siempre a nuestro gusto y necesidades.
Y qué ocurre cuando el salón no cumple nuestras expectativas y tenemos claro que debemos darle un cambio de aires. Podemos encontrarnos ante alguna de estas situaciones:
Amueblado
En el mejor de los casos nos encontraremos en un salón con un mobiliario moderno que aunque no encaje exactamente con nuestro gusto, siempre podremos adaptarlo con unos cojines y plaids nuevos, algo de decoración para darle un toque personal y una iluminación cálida y acogedora. Conseguirás un salón bonito y adaptado a ti con una mínima inversión.
Mobiliario antiguo
También te puedes encontrar con un mobiliario muy antiguo que el casero se ha negado a retirar y lo que es peor no quiere que modifiquemos su aspecto. En este caso deberás compaginar lo antiguo con lo moderno, escogiendo para ese mueble algunas piezas de decoración actuales y destinar todos tus esfuerzos en modernizar el resto del salón con unos cojines bonitos, unas cortinas de tejidos ligeros que permitan entrar la luz y hacerlo más luminoso, una alfombra para dar calidez y también puedes destacar alguna pared con un color llamativo o un papel pintado original.
En cambio, si no tiene ningún problema en que tunees el mobiliario a tu gusto, ¡Has encontrado una mina de oro! Saca tu lado más creativo y transforma ese viejo mueble en una pieza única y original que imprima personalidad a tu nuevo salón.
Sin amueblar
Que esté sin amueblar, tiene un lado positivo y otro no tanto y es que deberás invertir en muebles nuevos, pero tendrás total libertad de elegirlos a tu gusto. Te aconsejo que pongas los muebles justos y cuanto prácticos y ligeros sean mejor, piensa que luego se irán contigo a otra casa.
5. Dormitorio
Tu casero no ha tenido suficiente con dejarte ese enorme y viejo mueble en el salón que ahora te encuentras con un antiguo y viejo cabecero e incluso con un armario haciendo juego. ¡No te angusties, siempre hay una solución! Si puedes quita el cabecero y sustitúyelo por uno más actual, pero si está unido al conjunto de la cama y no puedes quitarlo, yo optaría por darle una manito de pintura del color que más te guste, aunque si esto no es posible porque tu casero se niega puedes cubrirlo con algún papel adhesivo. Pero, si simplemente quieres un pequeño cambio, unas guirnaldas de luces junto con un cambio de textiles podrán lograr tu objetivo. Piensa que una pieza antigua aporta un toque de carácter a cualquier estancia y si no te lo crees te aconsejo que le eches un vistazo a mi post (Como decorar tu casa con objetos antiguos).
Cuando el dormitorio tiene poca luz y los muebles son oscuros debes apostar por ropa de cama, cojines, cortinas y también alguna alfombra para darle calidez en tonos claros, así lograrás que luzca mucho más luminoso y acogedor.
Si no tuviera muebles, puedes ahorrar mucho simplemente con un poco de ingenio. Un cabecero original de palos de madera, una alfombra de yute o incluso algún tapiz te permitirán tener un nuevo y económico cabecero. Para las mesillas algún pequeño taburete, una cajita de madera o incluso una balda será suficiente para dejar tus enseres por la noche.
Y si necesitas un armario, en Ikea encontrarás una gran variedad de modelos y precios, pero si esta opción no te convence puedes recurrir a un burro y apostar por un armario abierto, es mucho más económico y no requiere montaje, eso sí tendrás que tenerlo todo siempre muy bien organizado.
6. Recibidor
Como ya os he comentado en anteriores ocasiones, el recibidor es la carta de presentación de nuestro hogar, por eso es conveniente no dejarlo en el olvido, además puede resultar de gran utilidad si el piso es más bien pequeño, ya que dispondrás de un espacio extra donde podrás almacenar ropa, zapatos y complementos. Si no quieres recargar esa zona puedes disponer únicamente de una pequeña balda con un perchero donde dejar las llaves y demás complementos cuando llegues a casa. También puedes optar por un zapatero, te permitirá liberar otro espacio de la casa y es muy útil para descalzarte nada más entrar en casa.
7. Balcón o terraza
Si eres de los afortunados que disponen de un pequeño balcón o terraza, no debes desaprovecharlo e imprimirle también a esa zona tu sello personal.
Césped artificial, losetas de madera de fácil montaje o simplemente unas alfombras o jarapas ya cambiarán por completo esta estancia. Si no deseas gastar mucho en mobiliario para esta zona exterior porque no sabes si tu próxima casa tendrá balcón, te aconsejo que crees tus propios muebles con palets y unos almohadones o bien utilices un mobiliario que más adelante puedas utilizar también para el interior.
Fotografías: drlivinghome.com; cocolapinedesign.com; Hans Mossel; xoxobella.com; stijginge.com; theeverygirl.com; elmueble.com